JAVIER MEDINA
Posiblemente el nuevo estilo de gobierno que se avecina hizo recapacitar a los más importantes empresarios del país para buscar socios estratégicos donde, hasta antes de la globalización, podrían ser vistos como los últimos rincones. Pero la nueva era puede equilibrar los planos cuando de inversiones y desarrollo se trata Tienen que encontrar el camino para la incursión social anunciada por el régimen que se instalará este 28 y esas rutas no estaban tan lejos, las tienen frente a sus ventanas, donde los comuneros o sus trabajadores también tienen tanta ansiedad como ellos para surgir, para crecer, con el mismo temperamento, aunque quizá con diferente ideología. Para entenderse, tienen que acercarse y conversar. Eso es lo que fomentó hace unos díasla Universidadde Piura, al reunir en Huampaní, Lima, a los más grandes inversionistas nacionales con personajes indígenas emblemáticos para sus pueblos, a fin de que se escuchen mutuamente cómo quieren desarrollarse y cómo pueden contribuir en ese propósito. La cita entre pobres y ricos, fue muy rica. Ronald Suárez Maynas, comunicador shipibo, estuvo en esas tertulias y volvió con ganas de tertuliar.
¿Quién los convocó a sentarse a una mesa a departir de un mismo plato?
Nos invitó el Programa de Alta Dirección dela Universidadde Piura. Fue una reunión para barajar propuestas sobre el desarrollo dela Amazoníarespecto a los pueblos indígenas.
Antes no había ocurrido nada similar.
Es la primera vez que nosotros nos acercamos y nos sentamos para escuchar a los empresarios más importantes del Perú para saber de cerca qué es lo que piensan dela Amazoniay qué quieren hacer. Y ellos también escucharnos a nosotros.
¿Quiénes fueron?
Dionisio Romero, Erasmo Wong, los de Cemento Pacasmayo y otros empresarios.
¿Solo estuvieron frente a frente, escuchándose mutuamente?
No. También nos invitaron a recorrer algunas de sus instalaciones y fábricas, comola Alicorpy Cementos Pacasmayo, intercambiando con sus dueños.
¿Y qué decían?
Que ellos siempre han pensado que nosotros, los pueblos indígenas, somos solamente protestas, solo quejas y nada más.
Y ustedes también de que ellos solo son explotadores, que solo los ven como peones.
Si, así es. Pero ahora queremos cambiar, ser más propositivos porque queremos, también, ser más como pueblos. Nosotros también queremos desarrollar sin perder identidad. Pero para llegar a eso tenemos que lograr varias cosas.
¿Cuáles?
Por ejemplo el respeto al derecho a nuestras tierras. Para eso necesitamos seguridad jurídica, la titulación de nuestros territorios y la ampliación de territorios que han aún están en trámite. A la brevedad es indispensable, igualmente, la ley de consulta para los pueblos indígenas. Sin eso no podemos hablar de desarrollo.
¿Todo eso no fueron malas palabras para los empresarios?
No. Inclusive ellos han saludado y han dicho que es urgente tener una ley de consulta.
Sorpresivamente conmovedor.
Es que este ha sido un diálogo de sensibilización, de entendimiento. Fue un diálogo para darnos confianza entre nosotros.
¿Han llegado a la confianza?
Todavía. No ahorita, porque fue un primer acercamiento. Se ha propuesto otro que se debe concretar antes de que entre en ejercicio el nuevo gobierno.
La primera cita fue de conocimiento mutuo. ¿La segunda de qué hablarán?
Hablaremos de propuestas y de lo que queremos. Nosotros tenemos mucha materia prima, muchos recursos, pero, como digo, aún hay desconfianza, hay cierto temor.
¿Temor a qué?
Nosotros queremos nuestro desarrollo, pero si vienen las inversiones, no queremos ser peones ni alguien que mira nomás lo que hacen. También queremos formar parte de la empresa, ser socios, legar a tener representantes en los directorios.
¿Usted considera estar en condiciones de ser director de una empresa?
Soy comunicador social en proceso de titulación enla Universidad JaimeBausate y Meza, tengo un diplomado en Revitalización Lingüística y Cultural enla Universidad NacionalMayor de San Marcos; seguí un diplomado en derecho internacional de pueblos indígenas, medio ambiente e interculturalidad enla Universidad SanAntonio de Abad del Cusco, y me especialicé en cinematografía indígena, en Bolivia.
Entonces sabe que son el gobierno y los empresarios los que ponen freno a la ley de consulta. ¿En estas reuniones les explicaron por qué?
Justamente eso fue lo que queremos hacerles entender y que también nos entiendan, pues sin la participación de los pueblos indígenas no podemos estar hablando de desarrollo.
Tampoco pueden hacerlo sin considerar al gobierno.
Nos imaginamos que el nuevo gobierno es pro indígena. Entonces, sabrá articular nuestras propuestas.
¿Como cuáles?
Por ejemplo se ha propuesto crear el Consejo Nacional de Desarrollo Para los Pueblos Indígenas, como interlocutor entre los pueblos indígenas y el Estado, que canalice las propuestas porque las organizaciones indígenas, como AIDESEP, CONAS y otras están viendo cómo debemos forjar nuestro desarrollo.
¿Cómo cuadran los empresarios en ese esquema?
Tendrían participación en este consejo, pero habría que hacer la propuesta. Si no hay eso no podemos hablar de desarrollo con identidad o desarrollo equilibrado. Por ejemplo hay petroleras que están pagando 4 mil soles para que les permitan hacer exploración sin estudios de impacto ambiental o valorización económica.
¿Los empresarios les aclararon en qué están dispuestos a reformar su actitud ante la ley de consulta?
Todavía no hemos estudiado caso por caso. Solo se han referido, como primer paso, que están de acuerdo en que se promulgue la ley de consulta.
¿Este acercamiento será una adecuación del empresariado, una búsqueda de socios estratégicos ante los anuncios que se hacen sobre todo en política social?
No lo se, pero si les escuchamos decir que la inversión será inversión nacional. Nosotros mismos creemos que nuestros empresarios pueden trabajar en nuestras zonas, pero tiene que haber más comunicación y confianza. En eso estamos seguros de que el nuevo gobierno dará un paso importante, porque también ellos quieren que nosotros podamos desarrollarnos. Si nosotros solamente hablamos de defensa territorial, nuestras comunidades igual van a entrar a talar los bosques y las mineras también. Para evitarlo, hay que hacer una muy buena negociación en base a una buena ley que nos garantice que podremos seguir viviendo miles de años n nuestros territorios, como hemos vivido siempre.
Posiblemente el nuevo estilo de gobierno que se avecina hizo recapacitar a los más importantes empresarios del país para buscar socios estratégicos donde, hasta antes de la globalización, podrían ser vistos como los últimos rincones. Pero la nueva era puede equilibrar los planos cuando de inversiones y desarrollo se trata Tienen que encontrar el camino para la incursión social anunciada por el régimen que se instalará este 28 y esas rutas no estaban tan lejos, las tienen frente a sus ventanas, donde los comuneros o sus trabajadores también tienen tanta ansiedad como ellos para surgir, para crecer, con el mismo temperamento, aunque quizá con diferente ideología. Para entenderse, tienen que acercarse y conversar. Eso es lo que fomentó hace unos díasla Universidadde Piura, al reunir en Huampaní, Lima, a los más grandes inversionistas nacionales con personajes indígenas emblemáticos para sus pueblos, a fin de que se escuchen mutuamente cómo quieren desarrollarse y cómo pueden contribuir en ese propósito. La cita entre pobres y ricos, fue muy rica. Ronald Suárez Maynas, comunicador shipibo, estuvo en esas tertulias y volvió con ganas de tertuliar.
¿Quién los convocó a sentarse a una mesa a departir de un mismo plato?
Nos invitó el Programa de Alta Dirección dela Universidadde Piura. Fue una reunión para barajar propuestas sobre el desarrollo dela Amazoníarespecto a los pueblos indígenas.
Antes no había ocurrido nada similar.
Es la primera vez que nosotros nos acercamos y nos sentamos para escuchar a los empresarios más importantes del Perú para saber de cerca qué es lo que piensan dela Amazoniay qué quieren hacer. Y ellos también escucharnos a nosotros.
¿Quiénes fueron?
Dionisio Romero, Erasmo Wong, los de Cemento Pacasmayo y otros empresarios.
¿Solo estuvieron frente a frente, escuchándose mutuamente?
No. También nos invitaron a recorrer algunas de sus instalaciones y fábricas, comola Alicorpy Cementos Pacasmayo, intercambiando con sus dueños.
¿Y qué decían?
Que ellos siempre han pensado que nosotros, los pueblos indígenas, somos solamente protestas, solo quejas y nada más.
Y ustedes también de que ellos solo son explotadores, que solo los ven como peones.
Si, así es. Pero ahora queremos cambiar, ser más propositivos porque queremos, también, ser más como pueblos. Nosotros también queremos desarrollar sin perder identidad. Pero para llegar a eso tenemos que lograr varias cosas.
¿Cuáles?
Por ejemplo el respeto al derecho a nuestras tierras. Para eso necesitamos seguridad jurídica, la titulación de nuestros territorios y la ampliación de territorios que han aún están en trámite. A la brevedad es indispensable, igualmente, la ley de consulta para los pueblos indígenas. Sin eso no podemos hablar de desarrollo.
¿Todo eso no fueron malas palabras para los empresarios?
No. Inclusive ellos han saludado y han dicho que es urgente tener una ley de consulta.
Sorpresivamente conmovedor.
Es que este ha sido un diálogo de sensibilización, de entendimiento. Fue un diálogo para darnos confianza entre nosotros.
¿Han llegado a la confianza?
Todavía. No ahorita, porque fue un primer acercamiento. Se ha propuesto otro que se debe concretar antes de que entre en ejercicio el nuevo gobierno.
La primera cita fue de conocimiento mutuo. ¿La segunda de qué hablarán?
Hablaremos de propuestas y de lo que queremos. Nosotros tenemos mucha materia prima, muchos recursos, pero, como digo, aún hay desconfianza, hay cierto temor.
¿Temor a qué?
Nosotros queremos nuestro desarrollo, pero si vienen las inversiones, no queremos ser peones ni alguien que mira nomás lo que hacen. También queremos formar parte de la empresa, ser socios, legar a tener representantes en los directorios.
¿Usted considera estar en condiciones de ser director de una empresa?
Soy comunicador social en proceso de titulación enla Universidad JaimeBausate y Meza, tengo un diplomado en Revitalización Lingüística y Cultural enla Universidad NacionalMayor de San Marcos; seguí un diplomado en derecho internacional de pueblos indígenas, medio ambiente e interculturalidad enla Universidad SanAntonio de Abad del Cusco, y me especialicé en cinematografía indígena, en Bolivia.
Entonces sabe que son el gobierno y los empresarios los que ponen freno a la ley de consulta. ¿En estas reuniones les explicaron por qué?
Justamente eso fue lo que queremos hacerles entender y que también nos entiendan, pues sin la participación de los pueblos indígenas no podemos estar hablando de desarrollo.
Tampoco pueden hacerlo sin considerar al gobierno.
Nos imaginamos que el nuevo gobierno es pro indígena. Entonces, sabrá articular nuestras propuestas.
¿Como cuáles?
Por ejemplo se ha propuesto crear el Consejo Nacional de Desarrollo Para los Pueblos Indígenas, como interlocutor entre los pueblos indígenas y el Estado, que canalice las propuestas porque las organizaciones indígenas, como AIDESEP, CONAS y otras están viendo cómo debemos forjar nuestro desarrollo.
¿Cómo cuadran los empresarios en ese esquema?
Tendrían participación en este consejo, pero habría que hacer la propuesta. Si no hay eso no podemos hablar de desarrollo con identidad o desarrollo equilibrado. Por ejemplo hay petroleras que están pagando 4 mil soles para que les permitan hacer exploración sin estudios de impacto ambiental o valorización económica.
¿Los empresarios les aclararon en qué están dispuestos a reformar su actitud ante la ley de consulta?
Todavía no hemos estudiado caso por caso. Solo se han referido, como primer paso, que están de acuerdo en que se promulgue la ley de consulta.
¿Este acercamiento será una adecuación del empresariado, una búsqueda de socios estratégicos ante los anuncios que se hacen sobre todo en política social?
No lo se, pero si les escuchamos decir que la inversión será inversión nacional. Nosotros mismos creemos que nuestros empresarios pueden trabajar en nuestras zonas, pero tiene que haber más comunicación y confianza. En eso estamos seguros de que el nuevo gobierno dará un paso importante, porque también ellos quieren que nosotros podamos desarrollarnos. Si nosotros solamente hablamos de defensa territorial, nuestras comunidades igual van a entrar a talar los bosques y las mineras también. Para evitarlo, hay que hacer una muy buena negociación en base a una buena ley que nos garantice que podremos seguir viviendo miles de años n nuestros territorios, como hemos vivido siempre.
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